Hace un año fui diagnosticada de una protusión discal con estenosis del canal; situación que me estaba limitando la vida. No podía andar más de 200 metros sin sentir un intenso y constante dolor que iba desde las lumbares hasta la rodilla. Me había infiltrado ya 3 veces y necesitaba tomar analgesia a menudo, planteándome una operación. Entonces conocí a Josué y su equipo y empecé a trabajar con ellos. En un año me ha cambiado tanto la vida que ya no me la imagino sin ellos. No tengo dolor, puedo andar kilómetros y kilómetros sin molestias lumbares, he podido retomar la natación, duermo sin dolores y la verdad, estoy feliz. Ir a entrenar con ellos para mí es el mejor momento de la semana, no solo porque sé el bien que me hace en el cuerpo, sino también en la cabeza, ese chute de endorfinas es algo que engancha. Son maravillosos, han dado con los ejercicios que yo necesitaba, son tremendamente didácticos y hacen que no solo aproveche el rato que voy a entrenar, sino que traslade pequeños cambios a mi vida que hacen que me sienta mejor. Desde que conozco a Josué y su equipo soy mucho más consciente de mi cuerpo y de lo que debo y no debo hacer para sentirme bien. Entrenar con ellos es mucho más que una hora de ejercicios dirigidos, es salud, es aprendizaje y también diversión. Infinitas gracias, equipo. ¡sois estupendos!